A sus 28 años, Ronnie Renner, padre de dos hijos, ejerce una de las profesiones más peligrosas: es piloto de motocross freestyle – uno de los mejores del mundo. Hace un año, el estadounidense ganó… …el concurso que llevó a los Red Bull X-Fighters por primera vez a la Ciudad de México.
El 31 de marzo, nueve pilotos de la élite internacional del motocross freestyle intentarán una vez más tocar el cielo mexicano. 
Ocho de ellos se proponen desafiar a Ronnie Renner, el campeón del año pasado, mientras que uno de ellos se esforzará por ofrecer una noche inolvidable a los 42,000 espectadores en la Monumental Plaza de Toros. Este último se llama Ronnie Renner. Para el estadounidense, el deporte de FMX significa mucho más que la mera demonstración de unos trucos magistrales tanto difíciles como espectaculares. Debido a su gran amor al espectáculo también se expone al fracaso, pero aún así sale ganando.
¿Cuáles son sus recuerdos de la última actuación que los Red Bull X-Fighters ofrecieron en la Ciudad de México?
Recuerdo la enorme energía que reinaba en la plaza. La sola oportunidad de poder entretener a 42,000 personas fue ya algo tremendo para mí. Pero cuando gané delante de toda esa gente viví uno de los momentos más emocionantes de toda mi vida. Fue una de mis victorias más importantes, y creo que fue la más importante en lo que se refiere a mi carrera.
¿Por qué te parece tan importante?
Porque no hubiera continuado igual. Pero este triunfo me devolvió las ganas de seguir con este deporte. No me suele importar si gano o no, siempre que ofrezca un buen show. Pero compito y viajo tanto que ya había empezado a aburrirme un poco. El público mexicano me inspiró a darlo todo una vez más.
¿Qué significa „todo“ para un padre de dos hijos?
Uno se lo piensa muy bien si este tipo de espectáculos realmente debe ocupar tanto tiempo de tu vida. Este deporte es cada vez más peligroso y también los entrenamientos suponen un riesgo diario. Pero no quiero quejarme, ya que un mal día en la moto siempre es mejor que un buen día en la oficina.
Es usted el favorito del público, no sólo por los trucos que hace, sino también debido a sus famosas demostraciones de breakdance. ¿Cómo empezó todo eso?
Siempre hacía el payaso, también en el colegio. Me encantaba llamar la atención. En las fiestas solía ser el primero en lanzarme a la pista para hacer unos movimientos super raros. Siempre quería hacer reír a la gente.
En los eventos de FMX empecé a bailar porque quise diferenciarme del resto de los pilotos. Bueno, al principio quería bailar sólo después de una carrera buena. Pero ahora bailo también si la carrera ha sido mala. Lo hago para compensarme – y porque la gente lo espera de mí.
Dicen que para usted vale más la reacción del público que la de los jueces. ¿Está de acuerdo?
Lo mejor es si se entusiasman los fans al igual que los jueces. Es cierto que hay jueces a los que no les gusta cuando bailo, les parece una horterada y les falta el elemento „hardcore“. Para ser sincero, no me importa mucho. Para mí la reacción de los fans vale mucho más. Y fueron justamente esos mismos fans que me ayudaron a ganar en México. El aplauso de los fans es como un tipo de carburante.
El año pasado, después de su triunfo en la Ciudad de México, habló de „una noche extraordinaria que será difícil de superar“. ¿Cree que los Red Bull X-Fighters serán capaces de poner el listón aún más alto en 2006?
Con Travis Pastrana haciendo su show y con Nate Adams saltando como de costumbre, un espectáculo salvaje está garantizado. Estoy seguro de que los dos van a arriesgarse más de la cuenta. Seremos los testigos de una noche muy interesante.
¿Qué trucos enseñará el 31 de marzo?
De momento, estoy ensayando unas nuevas combinaciones de salto. Me encantaría mostrar un barrel roll que es una combinación de un giro de 360° y un backflip. Pero no es tan fácil.
¿Por qué?
Pues porque, dicho de manera simplificada, la moto no está hecha para girarse sobre dos ejes al mismo tiempo. Combinar un backflip con un giro de 360° va totalmente en contra de la física de mi moto y también es contrario a las leyes de la razón. Pero creo que puede funcionar.
Travis Pastrana ensaya el doble backflip. ¿Incluirá este salto próximamente en su programa?
Bajo determinadas condiciones ya lo logré en el entrenamiento. Pero a mí me parece una locura. A veces, Travis se arriesga demasiado. Seamos sinceros: ganar me encanta, pero está claro que no voy a poner en peligro mi vida por ese salto.
¿Qué papel juega el miedo en su profesión?
Al contrario de algunos de mis compañeros, tengo muy claro cuánto debo arriesgar. Afortunadamente, no he sufrido ninguna caída grave hasta ahora. Una vez no llegué a terminar un salto y tuve que saltar de la moto en pleno aire. Al aterrizar sufrí una contusión en los tobillos. Me dolió un montón.
¿Qué rumbo tomará el deporte? ¿Podremos presenciar unos saltos aún más extremos o serán más estilísticos, al igual que los que hacen los snowboarders?
Ya tenemos mucho estilo. Creo que habrá cada vez más combinaciones de saltos que serán cada vez más locas. El deporte será cada vez más extremo porque queremos ofrecerle cada vez más al público.
A los tres años usted se montó en una moto. Sus hijos tienen tres y seis años . ¿Ya han montado en moto?
El pequeño todavía no, todavía ensaya con la bici. Pero el mayor ya corre muy deprisa y con mucha seguridad. También quiere ensayar trucos todo el tiempo, pero intento retenerlo. Racer es muy pequeño para hacer un superman.
Sus hijos se llaman Racer y Rider. ¿Qué es lo que dijo su mujer a tal elección de nombres?
Convencerla tampoco fue tan difícil. La pregunta es qué nombre pondremos a nuestro tercer hijo, ya que ya no quedan nombres chulos empezando con “R”. A lo mejor le llamaremos Turbo.